30/06/2025
*Polo Villa: El Camino Musical de un Hijo de Ocampo, Coahuila Donde Hacen Cruz Los Estados*
Polo Villa, originario del ejido La Salada en Ocampo, Coahuila, es un ejemplo de perseverancia, pasión por la música y el deseo de superación que lo llevó a forjar una carrera artística que, aunque discreta en lo mediático, ha dejado huella en la música regional mexicana a través de su grupo y de 14 producciones discográficas a lo largo de varias décadas.
Su historia comienza con una meta distinta: quería ser normalista. Sin embargo, a los 16 años cruzó la frontera hacia Estados Unidos con la intención de trabajar en una refinería en el condado de Pecos y así poder comprar ropa para continuar sus estudios. Al recibir su primer sueldo de 90 dólares, lo comparó con el salario de un maestro y decidió no regresar. Fue entonces cuando la música apareció en su vida como una alternativa poderosa: alguien lo vio tocar la guitarra y lo invitó a cantar en reuniones familiares. Pronto, esas interpretaciones lo llevaron a ser contratado para amenizar fiestas particulares, y ahí empezó todo.
A lo largo de su trayectoria, Polo Villa grabó 14 discos con diferentes sellos discográficos. Entre ellos destacan Las Sambita bajo el sello 1987 Discos Omega, El Corrido de Juan Acosta (1993, Joey Records), El Vampirito (1996, Sigma Records), Me voy a largar de aquí (1996, Mayo Records) y Maldita Pobreza (2003), este último uno de los más reconocidos por el público.
En sus producciones también sobresalen algunos sencillos que marcaron su carrera como Cualquier Panteón es Bueno, Maldita Pobreza, Soy de Ojinaga y Desde Donde Hacen Cruz los Estados, todos reflejo de las vivencias del norte del país y de la vida del migrante.
Aunque nació en México y cursó la secundaria en Ascensión, Nuevo León, su formación artística la forjó en los escenarios pequeños, en fiestas, y posteriormente en estudios de grabación donde su estilo se consolidó. La autenticidad de su voz, el apego a las raíces norteñas y la sencillez de sus letras le valieron el reconocimiento de diversos sectores del público y algunos premios durante su carrera.
Aún queda pendiente una revisión editorial más profunda sobre su legado musical, pero lo cierto es que Polo Villa representa a todos aquellos músicos que, sin grandes reflectores, logran contar historias que se quedan grabadas en la memoria colectiva.
Su camino comenzó con un sueño truncado, pero con una guitarra en la mano, Polo Villa encontró su verdadera vocación.